Encuentro
Luis Lacalle Pou: “Para la oposición la crítica nunca es mucha y para el gobierno siempre es demasiada”
En el primer encuentro del año en Magnolio Sala, el director periodístico de Búsqueda, Andrés Danza, y el periodista Federico Castillo entrevistaron al presidente de la República, Luis Lacalle Pou, a poco más de cuatro años del inicio de su gestión.
La charla empezó indagando en el momento en el que Lacalle Pou se dio cuenta de que quería ser presidente. La respuesta fue concreta: el 17 de marzo de 1997, durante un acto político en Cerro Colorado, Florida. “Llega un momento en la vida en la que te preguntás: ¿En qué soy útil en la vida? ¿En qué puedo ayudar? Yo estaba por terminar la carrera de abogado, los planes de mi familia eran que fuera a estudiar a Estados Unidos, pero yo estaba lejos de ese plan”, contó.
En 1999, el actual primer mandatario se candidateó a diputado por la Lista 400 de Canelones acompañado en la lista por su madre, Julia Pou, y por la actual vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón. Sobre su primer discurso político, que tuvo lugar en Bella Unión, opinó que fue “corto y malo”.
Una de las lecciones que tuvo que aprender fue a delegar: “En el acierto o en el error”, es imposible no hacerlo. “Lo que se delega son atribuciones, pero no responsabilidades”, dijo.
En cuanto a su gobierno, repasó los inicios, que fueron complicados debido a la pandemia de Covid-19, que afectó los planes iniciales y obligó a actuar con rapidez. El 13 de marzo de 2020, al enterarse de los primeros cuatro casos de coronavirus, llamó a un consejo de ministros urgente y “ahí cambió todo”: “Dejamos los planes, agarramos un plan que no estaba escrito. El temor colectivo es de las cosas más complejas. Ahora nos olvidamos pero los supermercados de todo el mundo estaban vacíos, había fosas comunes y las ciudades estaban solitarias. Era algo que no sabíamos dónde terminaba”.
En ese sentido destacó la importancia que tuvo el Grupo Asesor Científico Honorario (GACH). Valoró que los científicos vinieran a generar el sentimiento de amparo que necesitaba la población y se pusieran a disposición de los uruguayos sin importar sus colores partidarios. “El GACH tuvo dos fortalezas, el asesoramiento técnico, que fue muy bueno y mucho, aunque no siempre estuvimos de acuerdo; y el respeto a las funciones de cada uno, que fue importantísimo”. Lacalle Pou aseguró que siempre se mantuvo una distancia entre lo que recomendaba y las decisiones que finalmente se adoptaban. “La otra condición muy importante fue que la gente veía que había científicos detrás, que en (esos) momentos de mucha turbulencia e incertidumbre había tipos en serio, no políticos, hablando de ciencia”, sostuvo el primer mandatario.
Más adelante, fue consultado sobre la seguridad, que pese a que se presentan mejoras en los indicadores, sigue siendo una preocupación para muchos de los uruguayos. “La inseguridad es una consecuencia de presencias, de ausencias y de situaciones particulares que llevan a que alguien se dedique al delito. No lo estoy justificando, estoy haciendo un análisis. Cuando uno evalúa cuál es el perfil de la gente que comete delitos, hay causas que hay que abordar, y no empiezan por el Ministerio del Interior ni por la Policía. Las causas hay que trabajarlas”, expresó.
En cuanto al lugar de la mujer en el Partido Nacional, el mandatario confesó que han tenido dificultades para acceder a puestos de decisión. Pese a eso, destacó que en su gobierno sí han ocupado cargos de relevancia, como es el caso de la vicepresidenta Beatriz Argimón, la ministra de Economía Azucena Arbeleche, la de Salud Pública Karina Rando y la de Industria Elisa Facio. Cuando se le preguntó si Uruguay está preparado para una presidenta mujer, calificó a la pregunta como “antiquísima”.
Por otra parte, repasó su vínculo con la oposición, frente a la atenta mirada de referentes políticos frenteamplistas. “Para la oposición la crítica nunca es mucha y para el gobierno siempre es demasiada”. Pero, entre risas, admitió que con algunos de sus opositores nunca podrá ponerse de acuerdo.
Sobre el cierre, Lacalle Pou expresó que el día más importante de su vida política será el 1 de marzo de 2025: “Quiero terminar y que digan que valió la pena”. Sin embargo, como en otras oportunidades, dijo ser reeleccionista, a diferencia de su padre, el expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera. “Lo ideal, a mi gusto, es dos veces, afuera y nunca más. Luego pasás a una etapa de docencia, una docencia que solo se aprende con las arrugas”, consideró.
Pese a que insiste en que aún queda mucho por hacer en este gobierno, contó que una vez que finalice planea tomar un descanso y que no va a trabajar desde el Parlamento ni en el Directorio del Partido Nacional. “Me gustaría surfear, bajar a caballo desde Artigas a Florida. Voy a ser militante político porque extraño a mi partido”.
Por último, resaltó que la coalición de gobierno se mantiene firme. “Hay que hacerle un cambio de aceite, revisar el motor y salir adelante. Todos saben que ese vehículo es necesario. A diferencia de la elección pasada, ya sabemos que va a haber coalición. En los programas de gobierno se puede prever y podemos encolumnarnos con los perfiles y matices”.
Una vez finalizada la entrevista, el equipo periodístico de Búsqueda le entregó al presidente una caricatura de Junior en la que se lo ve surfeando con la banda presidencial y una corona.
Fotos: Adrián Echeverriaga y Valentina Weikert
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