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Cómo es el edificio más sustentable de Uruguay

Publicado el 24.10.2023  - 11 minutos
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Fotos: Adrián Echeverriaga

Por Gabriela Pallares
@gabrielapallares

Sinergia Faro se convirtió en el primer edificio del país en obtener la certificación LEED Platinum: Core and Shell otorgada por US Green Building. Este reconocimiento culmina un cúmulo de procesos complejos y extensos que reflejan el compromiso de la organización con la sustentabilidad y el diseño responsable de los espacios de trabajo.

“El edificio más verde es aquel que ya está construido”, dice a Galería Bruno Pedreira, arquitecto y uno de los directores de Sinergia, haciéndose eco de una frase que pone en valor la reconversión de estructuras ya existentes para dotarlas de nuevos usos.

Sinergia Faro —el último edificio en incorporarse a la plataforma de espacios laborales de Sinergia Workspace— se basa en la recuperación de la icónica construcción que habitó el Hotel Sheraton Montevideo por más de 20 años. Ubicada en el corazón de Punta Carretas, la propuesta desembarcó con el propósito de ofrecer experiencias que incentiven el intercambio y la convivencia, reaprovechando su estructura para convertirla en lugares de trabajo que potencian a sus usuarios.

Los 26 niveles se desarrollan desde una perspectiva que ofrece alternativas de uso para las empresas. El foco de la auditoría ambiental a cargo del organismo internacional se centró en la estructura y los cerramientos exteriores del edificio, diseñado y construido según criterios de gestión de agua, energía, selección de materiales y calidad del aire interior, entre otros.

Para conocer en detalle qué implica adentrarse en el desafío de calificar este sistema de consenso global para el desarrollo de edificios de alta eficiencia, Pedreira explicó a Galería las particularidades del proceso, los logros alcanzados y los grandes diferenciales que hacen de Sinergia Faro una construcción pionera en Uruguay.

¿En qué instancia del proyecto se propusieron aplicar a esta certificación?

A nivel internacional, las certificaciones de los edificios son un aspiracional para la mayoría de las empresas, no solo por un tema de posicionamiento sino para resultar más atractivas para clientes. Como grupo, Sinergia tiene una meta de sustentabilidad muy pronunciada desde hace un tiempo y esta certificación en particular surge un poco de ese propósito de tener más conciencia sobre cómo usamos los recursos y cómo habitamos el planeta. Mientras hacíamos el desarrollo del proyecto, nos dimos cuenta de que este tipo de certificación resultaría superimportante. De hecho, tenemos de clientes empresas que prácticamente tienen como requerimiento instalarse en sitios certificados. La mayoría son multinacionales y esa línea viene desde la casa matriz. La decisión de aplicar a LEED surge un poco de eso y también desde lo comercial, siempre conectando de forma genuina con el principal objetivo de ser más responsables con el entorno.

Este tipo de certificaciones implica procesos sumamente complejos, ¿cómo lo llevaron adelante desde Sinergia?

Esto funciona con un sistema de puntaje y hay miles de ítems. Tal es así que no solo tuvimos nuestro equipo de obra in-house, sino que además, para lograr la certificación, debimos armar un grupo específico al que le llamamos “equipo LEED”, encargado de hacer todo el seguimiento. Presentamos 1 millón de certificados porque te exigen tener documentada cada acción que se toma en términos de sustentabilidad. Además, trabajamos en conjunto con Green Group, que brinda asesoramiento en la gestión con el organismo que regula esto a nivel internacional.

Antes de aplicar a Platinum, ¿se necesita una instancia de certificación previa?

Hay que precertificarse antes de obtener la certificación oficial. Hay ciertos matices, se puede certificar el edificio completo o solo la operación. Entonces vas logrando estas “cocardas” que validan el cumplimiento de determinados estándares. En el caso de Sinergia Faro, en su momento, la meta era lograr el Gold, pero en la medida que entendimos cómo funcionaban los distintos puntos nos dimos cuenta de que valía la pena ir por más. Terminamos apuntando a ser Elite Platinum, que es la certificación más alta que existe y que obviamente tiene todo un desafío.

Es el primer edificio de Uruguay en obtener este reconocimiento. ¿En qué medida se destaca en comparación con otras construcciones certificadas a nivel local?

Los matices dentro de lo que es LEED son bastante claros. Tenés distintos rubros en los que sumar puntos y podés estar en algunos mejor que en otros. Hay otras certificaciones de arquitectura como la famosa Triple A, que apunta a parámetros bien objetivos en cuanto a materialidad, sin tener en cuenta otras condicionantes sustentables. En cambio, LEED va un poco más profundo.

¿Reconvertir una estructura preexistente formaba parte de los requerimientos?

Además de ser un ítem importantísimo para LEED, esta decisión hace que desde nuestro lado todo sea mucho más genuino. La industria de la construcción es una de las más contaminantes y nosotros ya tenemos un edificio que no le quita espacio a ningún otro tipo de actividad que pudiese ser beneficiosa con el medio ambiente. Es decir, si se construye desde cero, no importa qué tan verde sea el proceso, se genera gran impacto. Otro de los grandes aportes que tiene el modelo que ha usado Sinergia en todos sus edificios es que toma estructuras que tienden a la obsolescencia, nosotros les llamamos “elefantes blancos”, esas construcciones raras que hay en la ciudad que por determinadas coyunturas han dejado de aportar valor. Ese tipo de edificios empiezan a convertirse en una especie de agujero negro que se deteriora paulatinamente, incluso afectando dinámicas de los vecinos. El hecho de tomar el lugar que ocupaba un icónico hotel y reciclarlo va en línea con una frase que se usa mucho en estos contextos: el edificio más verde es aquel que ya está construido. El concepto de arquitectura adaptativa es bastante conocido y muy aplicado en ciudades cuyos cascos antiguos conservan estructuras abandonadas. En Latinoamérica empiezan a haber ejemplos de reconversión; sin ir más lejos, la Ciudad Vieja está en este camino. Pero por lo general cuando se necesita hacer un gran desarrollo no se piensa en infraestructura existente.

Quizás porque se asumen otros riesgos y, por sobre todo, otros costos.

Por supuesto. Tenés que trabajar sobre un lienzo ya existente que tiene sus cicatrices, su carga simbólica para el barrio, su lugar en el imaginario colectivo de las personas. Eso es algo con lo que jugamos mucho, pero, de cara a este tipo de certificaciones, el hecho de que sea un edificio antiguo que adquiere nuevos usos como espacio de trabajo toma un gran valor.

¿Cómo se alterna esa convivencia entre lo nuevo y lo existente? ¿LEED impone un cierto margen de respeto hacia la estructura antigua?

Nosotros certificamos cerca del 75% de los residuos de obra, es decir, que de todos los escombros se clasificó ese porcentaje. A su vez reutilizamos 70% del edificio antiguo, que es un número altísimo. Entiendo que LEED no tiene un lineamiento tan rígido con respecto a elementos puntuales, sino que lo que hace es evaluar la propuesta. En este caso se conservaron las puertas del hotel y se reubicaron mármoles, por ejemplo. Tratamos de tocar lo menos posible y el resultado es un edificio con una presencia estructural muy fuerte. Ha sido un gran desafío el diálogo entre lo nuevo y lo antiguo desde lo arquitectónico. Para ello nos vinculamos con estudios especializados en este tipo de proyectos que están marcados por su herencia.

¿Qué aspectos hacen de Sinergia Faro un edificio verde?

Hay muchos factores que contribuyen, incluso importa la ubicación de la estructura en relación con la movilidad de las personas. Sinergia Faro está situado en un lugar muy céntrico, por lo que, desde el diálogo con LEED, propone una eficiencia en cuanto a los tramos que tienen que recorrer los usuarios a nivel urbano, que muchas veces están vinculados a emisiones de determinado tipo de transporte. Después hay grandes rubros de gestión de energía, agua y residuos. Tenemos un 60% de ahorro de agua y pronto ese valor se aumentará, un 35% de ahorro total de energía y una cobertura de 7% del consumo anual a través de energías renovables. En este punto se destacan los paneles solares, pero también incorporamos una solución muy innovadora que, tengo entendido, es la primera vez que se implementa en Uruguay, que son unos vidrios con la capacidad fotovoltaica de incorporar energía solar. Otro punto que tuvo mucha incidencia en LEED fue el rooftop, que es uno de los más altos de Montevideo que tiene paisajismo con vegetación autóctona. A nivel general las plantas tienen un valor muy importante en Sinergia Faro, están cuidadosamente seleccionadas y distribuidas por todos los pisos. El hecho de que sean autóctonas o adaptadas hace que su consumo de agua sea eficiente.

¿Cómo abordaron el tema de calidad de aire que tanto protagonismo toma en la pospandemia?

Desde el diseño de la infraestructura de inyección y previsión de aire, superamos más de 30% de lo que exigen las normativas internacionales, lo que significa que podemos inyectar esa cantidad más de aire limpio a los distintos espacios. Esto también tiene que ver con cómo es el aire en Punta Carretas, por ende, con el carácter locativo del edificio. Si estuviéramos al lado de una fábrica, el entorno sería mucho más hostil para la calidad de aire.

Respecto a los números, ¿qué implica apostar a una certificación Platinum?

Es una de las preguntas que más nos hacen y la respuesta es que depende, es muy relativo, Uruguay representa un desafío ya de por sí en lo que refiere a la oferta y la variedad de productos o tecnologías que puedan clasificar para esta certificación. Hay que importar mucho. Dependiendo de dónde quieras desarrollar este tipo de cosas y en qué momento de la historia lo quieras hacer, los costos van a ir cambiando. También, la escala de los importes. No es posible decir: “Hacer un edificio sustentable sale tanto más caro que uno normal”. Pero sí, claramente es más costoso. De todos modos es una inversión que la ves reflejada y se traduce en el espíritu del proyecto. El retorno no solo viene en el ahorro directo en las facturas de servicios, sino que a su vez pone en exposición una postura frente a cómo hacer las cosas. Por supuesto que tiene que ver con un abordaje arquitectónico superclaro, pero también se traslada a lo que representa para Sinergia habitar un espacio de trabajo.

¿De qué modo este tipo de apuestas reposiciona a Sinergia como una opción más atractiva para la instalación de nuevas empresas?

El hecho de que un edificio sea LEED tiene un montón de ventajas y beneficios. Desde nuestra organización hay una conexión genuina con el propósito de la certificación que tiene que ver con la conciencia y el bienestar para empresas y personas. Hay un aspecto superinteresante con respecto a esto. Uno de los requerimientos más importantes de LEED es hacer un manual del inquilino; esto es un documento que se comparte no solo a aquellas personas que utilizan el edificio, sino que muchas veces se pone a disposición de áreas públicas para que la gente sepa cuáles fueron las medidas que se han ido tomando en cuanto a sustentabilidad. De esa manera uno puede contar de qué tratan estas cosas y despertar la inquietud en otros, generando mayor conciencia e inspiración.

¿Las empresas que se instalan en Sinergia tienen que seguir ciertos lineamientos asociados a este espíritu?

No, digamos que trabajamos como un paternalismo libertario. Nosotros les ofrecemos dentro de la operación un montón de oportunidades que tienen que ver con el respeto por el entorno, como la recolección de residuos. Luego muchas empresas lo que hacen es capitalizar toda esta inteligencia que tuvo que suceder para poder implementar LEED en sus propias oficinas. Esto también les permite a ellos encaminar otro tipo de conversaciones, de certificaciones propias en donde absorben el recorrido que hizo Sinergia. Si bien no exigimos nada, la sustentabilidad está en el alma del edificio y en la operación de todas las dinámicas que propone.

Arquitectura, innovación y diseño
2023-10-24T14:19:00

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