Celebrar el milagro concedido
La beatificación de Jacinto Vera, el obispo uruguayo que podría ser santo
La Iglesia Católica lo declaró beato en una ceremonia realizada en el Estadio Centenario

Fotos: Lucía Durán
Bajo una lluvia intermitente y un sol que por momentos amagaba a salir pero no se decidía, el sábado 6 fue beatificado Jacinto Vera, el primer obispo uruguayo, en una ceremonia realizada en el Estadio Centenario. La tribuna Olímpica estaba llena de creyentes que disfrutaron desde temprano la jornada de festejo organizada por la Iglesia católica. La alegría era tal que las más de 15.000 personas bailaban, hacía olas y cantaban: “Y ya lo ve, y ya lo ve, Jacinto Vera beato es”. Los paraguas se abrían y cerraban coloreando la tribuna mientras en las primeras filas, el blanco de las sotanas de los curas contrastaban la escena.
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