Mirador internacional
El Festival de Cine de Venecia y la Semana de la Moda de Tokio
Sofia Coppola presentó con la actriz Cailee Spaeny la película Priscilla, que participa en Venecia en competición. Fotos: AFP
Todos a Venecia. Desde el 30 de agosto hasta el 9 de setiembre se lleva a cabo la 80a edición del Festival de Cine de Venecia, donde se expondrán los estrenos más importantes para lo que queda de 2023 y principios de 2024. Una edición que estará marcada por la huelga del sindicato de actores y guionistas, que ya lleva más de 120 días. De hecho, Damien Chazelle, director de La La Land y Babylon, presidente del jurado internacional, lució el día de la inauguración una remera a favor de la huelga. Lo mismo hicieron varios cineastas y otros miembros del jurado, como Martin McDonagh y Laura Poitras.
Woody Allen presentó su película Coup de Chance, fuera de competencia, junto con sus protagonistas, las francesas Valérie Lemercier y Lou De Laage.
A su vez, poco después de iniciada la huelga, la película que estaba anunciada para inaugurar el festival, Challengers, fue retirada de la lista y, en su lugar, abrió esta 80a edición el filme Comandante, del director Edoardo De Angelis, una historia sobre el militar italiano Salvatore Todaro. En estos días también se ha proyectado en Venecia la nueva película de la directora italiana Liliana Cavani, El orden del tiempo.
El director estadounidense y presidente del jurado Damien Chazelle llevó una remera en solidaridad con el Gremio de Escritores en huelga.
La grilla del festival continúa con películas como la biopic Ferrari, dirigida por Michael Mann (El informante, Colateral), en la que Adam Driver se pone en los zapatos de Enzo Ferrari; el último filme de Yorgos Lanthimos (La favorita), Poor Things, y The Wonderful Story of Henry Sugar, un cortometraje de Wes Anderson (Moonrise Kingdom) basado en un relato de Roald Dahl.
Patrick Dempsey, Daniela Piperno, Michael Mann y Adam Driver presentaron Ferrari, la última película de Mann, protagonizada por Driver.
Carla Bruni y su esposo, el expresidente de Francia Nicolas Sarkozy, llegaron al Hotel Excelsior de Venecia en un barco-taxi.
Luc Besson llegó a la premiere de su película, Dogman, con su esposa, Virgine Besson-Silla, y sus hijos Sateen Besson, Mao Besson y Shanna Besson.
Entre las decisiones más polémicas del festival estuvo la de aceptar filmes de tres directores controversiales. Más específicamente, acusados de abuso sexual: Luc Besson participará en la sección en competencia con Dogman; Roman Polanski estrenará The Palace fuera de concurso, y lo mismo hará Woody Allen con Coup de Chance, su primera película completamente hablada en francés.
Los actores daneses Mads Mikkelsen y Amanda Collin en la alfombra roja de Basterden, presentada en competición en el festival.
La directora neozelandesa Jane Campion, miembro del jurado, en la ceremonia de apertura de la Mostra de Venecia.
El actor Alfredo Castro y el director Pablo Larraín, ambos chilenos, en la presentación de El Conde, filme que participa en el festival en competencia.
Alberto Barbera, director de la Mostra de Venecia, dijo que su trabajo es dirigir un festival, no ser juez: “No entiendo por qué no se puede distinguir entre las responsabilidades del hombre y las del artista”, expresó.
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Japón no tradicional. Vistiendo trajes de sastre con gorras de visera, corsets de lazos con pantalones deportivos, chaquetas bomber y tiro bajo, cero tacones y maxijoyas, la moda nipona abofetea su tradicionalismo con el guante del street wear. Del 28 de agosto hasta el 3 de setiembre tuvo lugar la Semana de la Moda de Tokio para posicionar a diseñadores emergentes a la altura de las campañas de venta internacional, pensando en la próxima temporada Primavera/Verano 2024.
En la Semana de la Moda de Tokio los diseñadores apostaron a la comodidad.
La marca de moda Seivson busca romper con las líneas prolijas de los trajes tradicionales.
De la mano de más de 50 marcas (entre las que se destacan algunas como Seivson), el evento, patrocinado por Rakuten Group, Inc. —el mayor minorista online de Japón—, hizo dos grandes apuestas este año: la primera es animarse a romper con lo establecido; la segunda, apoyarse en la inteligencia artificial (IA). En cuanto a lo estilístico, la idea era mostrar que de una sociedad donde coexisten diferentes valores inevitablemente iba a nacer una nueva era “más brillante y más libre”. El uso de IA fue para, lejos de suplantar modelos nipones, mejorar la presentación de los diseños a través de un método de expresión de gráficos por ordenador en tres dimensiones, abreviado como Full 3DCG. Ahora, los modelos abandonan el espacio restringido de la pasarela para adentrarse en un mundo abierto, donde el poder de la moda no tiene límites.
Publicado el 30.08.2023
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